CUANDO CASI TODO TERMINA

 Ella es una persona que suele ver a la gente morir. Quizás por ello sea tan dura y fría en algunos momentos. No tiembla ante las decisiones difíciles. Como ella misma afirma “es alguien de blancos o negros, sin tonos intermedios”. A pesar de que eso siempre me dió miedo oírlo, a veces lo envidio. Yo me suelo debatir entre una enorme amalgama de tonalidades imposibles. Así que, en cierta manera, lo suyo a veces lo considero una virtud envidiable. En cualquier caso, eso significa que tampoco habrá segundas oportunidades. Simplemente no me ama. Y eso tan solo es el final.

Así fue como a finales de agosto, sin haberlo elegido, iba a iniciar un viaje que cambiaría mi vida. O almenos eso espero.



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